Olivia Rodrigo comparte un concierto completo por youtube y revoluciona la plataforma
musica 11 Oct.
Mucho antes de que lleve su segundo álbum de gira, ha decidido cantar temas del proyecto en un concierto realizado el lunes 9 de octubre en el Teatro de Los Ángeles del Ace Hotel. Levándolo íntegramente a YouTube, causando revolución entre los fans que pueden disfrutar este concierto completo. Comenzaba con ‘Vampire’ junto a Dan Nigro al piano y finalizaba ella misma al piano cantando para, luego, recibir la compañía de la guitarra acústica de Dan. Todo para escuchar temas como ‘Vampire’, ‘Lacy’, ‘Ballad of a Home Schooled Girl’, ‘The Grudge’, ‘Teenage Dream’, ‘Get Him Back’ o ‘All American Bitch’. Todo para finalizar cantando ese baladón que representa ‘Traitor’. Olivia Rodrigo es capaz de poner en pie al público con su voz, el piano o un par de guitarras acústicas, dando una muestra de lo que será la gira de GUTS el 2024. esta presentación estará activa por tiempo limitado: «En YouTube hasta el jueves 12 de octubre».
La cantante de 20 años tiene 77 conciertos programados para su Guts World Tour y Olivia ha revelado cómo va a hacer frente a su agotador calendario.
Una joven que con tan solo 20 años ya puede decir que su segundo disco, Guts, tiene entre manos un candidato a mejor largo del año en el mainstream. Y que posiblemente quedará como uno de esos álbumes que marcan una carrera, un zurriagazo sónico al que le sucede un poco lo mismo que vivimos con Billie Eilish hace un par de años: generacionalmente no nos pertenece, pero es imposible resistirse a todo lo que remueve. La fórmula es tan sencilla como endiablada: se trata de coger toda la esencia de
la juventud, desde las comedias románticas de Julia Stiles hasta Superempollonas; desde la propia Eilish a ecos del primerizo Trent Reznor (cuando todavía se rompía el alma en máquinas en los inicios de Nine Inch Nails en vez de ganar una arroba de Oscar). Es la juventud entendida como una descarga, algo que explica por qué la cantante confiesa que tiene “un héroe” tan inesperado como Jack White: un tipo que agarró la primera juventud cuando ya se le escapaba y la convirtió junto a su exmujer en tres discos infinitos de The White Stripes (y en una discografía bastante sobresaliente a partir de ahí, con o sin Meg White). Que estemos hablando de un fenómeno indie para referirnos a una rutilante estrella pop es solo una de las maravillosas contradicciones que surgen al hablar de Rodrigo. En esta página no se reconocen términos como “placeres culpables” ni otras cobardías culturales.
También es una colección de canciones tirando a pop-punk en lo movidito y a la balada
moña en lo descansado, todo firmado por una autora que tiene las cosas clarísimas. El disco está concebido como la banda sonora de la peli de estudiantes que no acaba, como la música de la juventud revivida de forma vicaria. Como las canciones con las que nos tropezábamos. Es incluso posible que genere gusanos de memoria, y que temas como Bad idea right? empiecen a sonar en nuestros recuerdos de juventud, aunque su autora no hubiese ni nacido aún. Y eso que Rodrigo no venía del mejor vehículo a este estrellato: participaba en un producto derivativo, High School Musical, serie salida de una trilogía prescindible cuyo mayor contribución al mundo fueron Zac Efron y Vanessa Hudgens. Si el producto principal solo dio para eso en 2006, es normal pensar que su serie derivada de 2019 (y antes de eso una sitcom también en Disney) no le diese a Rodrigo para convertirse en su otra heroína: la inteligentísima llenaestadios Taylor Swift.
Aquí es donde entra el genio de la chavala. Mientras otras chicas Disney (y esto incluye a Miley) se pusieron en terceras manos para reinventarse, la joven se puso en manos de sí misma: su primer single, Drivers license, en enero de 2021, era una canción sobre sacarse el carné de conducir cuando lo has dejado con el novio (esto igual hay que recalcarlo: Rodrigo le canta a las cosas intrascendentes, a los finales de segundo acto, a las cosas que solo duelen así una o tres veces, porque no pueden repetirse como los errores de los adultos) y la firmaba ella. También rompió todas las listas y la lanzó al estrellato mundial Sour; el disco subsiguiente que estaba bien, pero no era Guts, y lo firmaba entero ella. Y de ahí a que Alanis Morissette le tirase flores, a cantar con Avril Lavigne y a situarse como un fenómeno tiktokero y juvenil. Se llevó tres Grammy. Disney le grabó un documental. Y aun así nada podía habernos preparado para Guts: una colección de himnos con los que echar el cierre por unos años a la idea de música para adolescentes, porque trascienden la etiqueta. A partir de aquí, solamente se puede crecer.
Por Paola Ch.
FM HIT
Suscríbete a nuestro Boletín
Mantente informado de noticias, el ranking de tus canciones preferidas y participa de concursos