Tras pasar por la Unidad de Cuidados Intensivos (UCI) y vivir una experiencia cercana a la muerte, la ‘reina del pop’ pudo celebrar su 65 cumpleaños y retomar una exitosa carrera de más de cuatro décadas. Iniciando el ‘tour’ con cuatro conciertos en Londres, la artista estadounidense desató la locura en el Sportpaleis de Merksem de Amberes (Bélgica). Allí, más allá de interpretar sus grandes éxitos y poner a los cerca de 20.000 asistentes a cantar con ella, Madonna también tuvo tiempo para compartir un discurso tan breve como emotivo: «Hace menos de cuatro meses estaba inconsciente en el hospital y la gente pensaba que quizá no sobreviviría. Es un maldito milagro que esté aquí ahora mismo», celebró con una botella de cerveza en la mano. Madonna reconoce que todavía no se encuentra del todo recuperada: «Tengo que decir que ahora no me siento muy bien, pero no puedo quejarme, porque estoy viva. Gracias a Dios por mis hijos y por todo su amor y apoyo», ha comentado en su show.

La estrella del pop también se acordó de su madre, quien falleció a causa de un cáncer cuando ella solo tenía cinco años: «Mi madre, que Dios la bendiga, debe estar velando por mí. Me dijo ‘Chica, no es tu hora de irte'», ha dicho visiblemente emocionada.

una gira que tuvo que ser pospuesta por una misteriosa enfermedad de la que nada se supo hasta tiempo después, cuando la propia artista se sinceró con sus seguidores. El pasado 14 de octubre, el O2 Arena de Londres fue el escenario escogido para comenzar un tour mundial en el que la artista rememora su trayectoria profesional y musical. Madonna ha vuelto más fuerte que nunca, sorprendiendo con sus looks y con la carisma reivindicativa que siempre ha acompañado a sus proyectos.

“Hace menos de cuatro meses estaba en el hospital, inconsciente, y la gente pensaba que quizá no sobreviviría. Es un puto milagro que esté aquí ahora mismo”, admitió la artista al público que acudió a verla en Amberes, Bélgica. Visiblemente emocionada, Madonna afirmó que no se siente muy bien, “pero no puedo quejarme, porque estoy viva”. Probablemente, no haya momento más celebratorio que este para la artista.

“Mi madre, que Dios la bendiga, debe estar velando por mí, me dijo: ‘Chica, no es tu hora de irte.’ […] Y me dieron otra oportunidad, así que estoy muy agradecida por ello. Debo decirles que ahora no me siento muy bien, pero no puedo quejarme, porque estoy viva. Gracias a Dios por mis hijos y por todo su amor y apoyo”, confesó.

El pasado 24 de junio, el agente de Madonna anunciaba que, debido a una infección bacteriana, la artista posponía la gira con la que iba a visitar principalmente Europa y Norteamérica. En España actuará en Barcelona. La situación parecía grave, pero la artista se recompuso para poder mantener las fechas y no dejar tirados a sus seguidores.

Esta es la tercera vez en apenas seis años que la cantante sufre algún tipo de enfermedad en vísperas de iniciar una gira, y una de las muchas a lo largo de su carrera. En 2020, justo antes del estallido de la pandemia, tuvo que abandonar un concierto en París: “Lamentamos informar que el espectáculo de Madonna está cancelado debido a lesiones permanentes”, anunciaba el comunicado.

En 2019 sucedió algo muy similar, cuando Madonna tuvo que cancelar su gira Madame X justo antes de empezar y también por problemas de salud. En este caso, la artista volvió a aducir una serie de lesiones en la rodilla y un malestar general de salud. Y es que en el caso de las rodillas, es un tema que se ha vuelto recurrente y le ha dado más de un quebradero de cabeza a la estadounidense.

Dos años antes, en 2017, Madonna tenía que cancelar su gira después de confesar una rotura de ligamentos que arrastraba desde 2015, cuando llevó a cabo la gira Rebel Heart. En ese momento la cantante se sometió a cirugía para reparar la rotura y de paso un tendón de su cadera, pero desde entonces esta dolencia le ha mantenido maltrecha en cada uno de sus tours.

Por Paola Ch.

FM HIT